sábado, 26 de agosto de 2023

Dibujo de una tarde

El sol brillaba todavía con un suave resplandor,

mientras éramos como estrellas cercanas pero ocultas por nubes.

Dibujabas un soldado del destino en carboncillo y polvo, 

mientras yo permanecía distraído en alguna veleidad.

Te miré y tus ojos entre alegres y tímidos parecían conectarse a mí,

me entregaste al soldado impreso de mil y ninguna batallas que aguardaría en algún baúl,

mientras me perdía de tu mirada y tus palabras,

durante el ocaso del sol.

Hoy somos gotas de lluvia que el cielo aún arroja mientras brilla el arcoiris tras alguna tormenta.

En algún sitio la guerra no ha dejado de existir, como tampoco el atardecer, 

ni el deseo de volver a conectarme con tus ojos.

viernes, 4 de agosto de 2023

31.12. 99

Te recuerdo:
Era el fin de un milenio y no me dijiste nada.
Nunca más nos tendríamos el uno al otro, excepto por la casualidad.
Pudo ser algo pero pudo más el silencio.