martes, 2 de agosto de 2011

Oeste

Como no poder soñar,
el aire para respirar,
sintiendo el viento
correr.
La distancia se
nos apodera,
del cuerpo y la sangre,
no sé,
donde ir.
Quisiera,
tantas cosas del mundo,
pero me confundo,
en el porqué.
Todos buscan,
la luz,
entre lo obscuro,
el camino seguro,
pero todo es
soledad.
Todos buscan,
entre lo profundo,
no más, digo al mundo,
quien sabe, donde ir.

2 comentarios:

Memo dijo...

Me leo para cachar si algo cambió. Te veo entre mis visitantes y te devuelto la deferencia.

Sigues escribiendo.
Seguimos.

Sigamos....

Marcelo Dance dijo...

Todos tenemos un lado oscuro. Sobre todo los lunáticos cancerianos. Pero a veces hay que salir al sol, aunque más no sea para desatormentarnos.
Saludos David!